“Ha sido bueno para mí, sólo cosas buenas”, dice Kristen después del estreno del fenómeno de vampiros. “En verdad me facilita hacer el trabajo que amo. Lo hace más fácil. No tengo que pelear por estar en una película que en verdad quiero hacer. Ya no es una pelea, pero si lo fue.”
Sobre New Moon, que está a punto de comenzar a filmar, Kristen dice estar “realmente emocionada”, pero “es un gran trabajo”.
“Es muy diferente, también, de la primera”, añadió. “Es una historia muy diferente. Pasan muchas cosas: (Bella) ya no tiene (a Edward), y se encuentra en un lugar donde tiene que pararse y madurar, y verla enfrentar la vida sin él va a ser interesante… todo es muy épico e interesante”.
En cines el 13 de Marzo, el drama The Cake Eaters, tiene a Kristen como Georgia, una adolescente de un pequeño pueblo quien, a pesar de tener un problema en el sistema nervioso que la hace temblar y arruina su plática, solamente quiere experimentar el amor por primera vez. Junto al actor de Tadpole, Aaron Stanford, y los nominados al oscar, Bruce Dern y Melissa Leo, acompañan a Mary Stuart Masterson en su debut como directora.
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